Hacia la "Politeia". (Parte I de la serie Avisos para México y la Tía Juana).

La felicidad es de quienes se bastan por sí mismos

Aristóteles



Nuestro país es un total desastre en materia política, ni siquiera llega a cumplir la calidad de “estado”; aún así, la apatía o desencanto que nos generan las promesas de cualquier partido político no es impedimento para que su voluntad afecte en nuestra vida diaria. Esto acarrea problemas a la hora que estas personas, "Políticos", aprueben leyes o aumentos, muchos no estaremos conformes.

¿Cuál es entonces el problema de la democracia? Que es un concepto que ya ha sido superado. Si funcionó para sociedades anteriores, la nuestra, que si bien no está del todo evolucionada nacionalmente hablando, las monarquías sexenales que impone la población votante, disfrazan su oligarquía con cuentos de estado benefactor en el mejor de los casos.

Ya desde la antigua Grecia se había visto la democracia con desprecio, con Platón por ejemplo, estamos conscientes de las consecuencias que puede traer “El poder de la plebe” mal aplicado. Podrá decirse que de este modo se puede lograr una apología al estado totalitario, mas de qué otra forma viene dándose la democracia en México sino como oligarquía partidista conjunta por “compadrismo” y un singular apoyo por parte del narco (O delincuencia, como diría Foucault en Vigilar y Castigar). Añadiendole la enorme ventaja de tener un pueblo pasivo; es decir, en base a la ignorancia y la abulia política del mexicano, sus gobernantes emplean un pseudototalitarismo. Sin embargo, ahí se incluyen grandes controladores como lo son los medios de comunicación y Estados Unidos.

Platón introduce la idea de una aristocracia como un gobierno manejado por los más aptos, los Aristos saben la necesidad de cuidar del estado, pues en él ven un reflejo de su propia alma, una visión metafísica que interactuaba con la política. México, desde antes de la llegada de los españoles, ha sido manejado por emperadores o teocracias; sin embargo, esta visión aristocrática ya prevalecía en el mundo precolombino, además de la necesidad de educar al pueblo como dijo ya Aristóteles.

El capitalismo y demás corruptores que se generaron tras la llegada de los del “Otro lado del charco” no dan cabida a la teoría política que ha ganado el grado de utopía: la politeia aristotélica. Que bien se le puede objetar su tendencia cristiana al poner como núcleo de la sociedad a la familia, o que justifique el esclavismo, es preciso ver que este sometimiento no ha desaparecido. Marx vio ese sistema de dominación, lo expone en su materialismo histórico, esa relación amo-esclavo que se ha presentado a través de la historia. Aún así, hay que señalar que en la actual burguesía esta relación se torna más cruel, al burgués no le van a interesar las necesidades de su subordinado una vez haya terminado su trabajo, su explotación resulta más peligrosa que la del esclavo, su mísero sueldo sólo le permitirá solventar sus necesidades básicas y seguir trabajando. Y no sólo nosotros estamos sujetos a este sistema, sino el mundo entero; por lo que es preciso comenzar en lo concerniente a nuestro país, y mejor aún, a nuestro municipio.
Si se tiene en mente una meta a la que debamos llegar como estado, idealmente, sería a una autarquía; pero, al grado en que estamos, sería relativamente imposible tal fin; por lo que, ante todo lo que se ha venido mencionando, los Aristos se encargarán de conducir a la comunidad hacia una Politeia, de donde su trabajo será inherente. Es decir, no se les verá como entes superiores, ya que están cumpliendo con un trabajo que responde a la misma sociedad en la que viven.

Es preciso detenernos y definir más explícitamente lo que Aristóteles pretendía con su Politeia, puesto que si no está totalmente de acuerdo con la democracia, depende de ésta para subsistir. En el libro IV de La Política, el Estagirita menciona que hay tres tipos de democracia “La primer forma de democracia es la que recibe este nombre en atención, sobre todo, al principio igualitario. La legislación de esta democracia en efecto hace consistir la igualdad en que los pobres no tengan preeminencia sobre los ricos, ni una ni otra clase tenga la soberanía, sino que ambas estén en el mismo nivel” esta es la que supuestamente tenemos, sin embargo no se practica porque necesita la participación íntegra de la población, razón principal por la que la democracia no funciona en México, sin contar la lucha de clases. La segunda y tercera formas de democracia responden a la participación de los ciudadanos en las formas de gobierno y su relación con la ley. Hay que apuntar la aparición de los demagogos y su relación con la democracia, puesto que es como funciona aquí, la apelación a la subjetividad para ganarse al pueblo y triunfar en las elecciones. La Politeia guarda en sí, una orientación hacia la oligarquía y una república, no se separa de la ética, por lo tanto se mantiene al margen de una virtud. Una Eudaimonia para la sociedad.

Tijuana siempre ha dependido de la federación, a la vez que debe adecuarse a las políticas de California, los proyectos municipales se logran una vez que el Ejecutivo viene a inyectar presupuesto; dejando al comercio, la prostitución, el narcotráfico, el “Turismo”, los migrantes, etc. Como únicas alternativas en las que la ciudad misma produce ganancias para sí. Lo que no se ha tomado en cuenta, desde hace mucho tiempo ya, es que el campo es la salvación que este país tiene y no aprovecha. Edgard Mason (1982) advierte que las tierras nacionales sufren severa erosión, por lo que junto con el descuido de los mexicanos, las tierras cultivables van minimizándose a grados agigantados. Menciona el autor “Al grito de ¡La tierra es de quien la trabaja! Los gobiernos revolucionarios procedieron demagógicamente a “darla” a quien muchas veces ni la trabaja o que, aún haciéndolo, no sabe realmente aprovecharla y la mayoría de las veces la abandona por falta de cariño o interés.” Lo que, junto con el apoyo que el gobierno le da a la industria maquiladora, propician el desplazamiento hacia las comunidades urbanas como sucede con Tijuana (aunque aquí es principalmente por nuestra proximidad con E.U) dejando grandes hectáreas de terreno a capitalistas, que como sucede en esta ciudad, tienden a convertir en fraccionamientos. Y reitera Mason “El campo mexicano nunca ha estado ni estará en manos de quienes deben tenerlo, de quienes verdaderamente lo quieren, lo conocen y lo hacen producir, por ello los métodos utilizados para trabajar la tierra: la “milpa”, el desmonte… practicados por comunidades indígenas y aún la hacienda… no resultaron lo eficientes que debían, ya que son resultados de sistemas inadecuados, pero el que hoy predomina, ha mostrado ser, quizá, el peor de todos, por ende, los resultados son tan graves.” He ahí la clara necesidad de los aristos, y su presencia en el campo como catalizadores para la restauración de una base económica para el estado.
Somos testigos de los estragos de la industria ante el proletariado, y el trabajo enajenado, la avaricia de los grandes empresarios y el flujo monetario derramado hacia el extranjero. Estos fenómenos pueden atribuirse a la imposición de sentidos por parte de los medios, donde el estado ha perdido su control. Del derroche de nuestros recursos naturales, y como se viene mencionando, de su desaprovechamiento, gracias a leyes que aún no pueden separarse de principios eclesiásticos, conservando la tradición teocrática, y adulando a nuestro vecino del norte.

Estos Aristos necesitan recobrar los sentidos autóctonos, donde el Arte puede intervenir satisfactoriamente, y poco a poco salir de la enajenación burguesa. El predominio de fuentes alternas de información, como el internet, es una de las primeras fases de intervención para el “Arte enajenado-desenajenante” y para los Aristos teóricos. A falta de una libre expresión apoyada por el país.

Si ha de continuar el sistema de dominación, el estado ha de conseguirse esclavos, y quiénes más que sus infractores: los presidiarios. Si éstos arremetieron contra la sociedad, es su deber pagar a ésta y no sólo vivir de ella. Si nuestra ciudad volviera los ojos al soporte agrario, sus “esclavos” pagarían su sentencia a base de “Fuerza de trabajo”, tal y como lo hace el capitalismo, dando pie a sistemas penitenciarios independientes del presupuesto del estado. A pesar de la decadencia en la que ha caído la industria, la globalización exige que se mantenga en pie, urbanizando cada vez más, obligándonos a importar alimentos y demás recursos básicos, ya sea por su bajo costo o su disponibilidad (donde, a veces, la calidad deja mucho que desear).

Tales propuestas pueden sonar graciosas, dada su nulidad a la Praxis, puesto que el principal impedimento se encuentra entre nosotros, la corrupción. Dando veracidad a la famosa frase de Hobbes, Homo homini lupus, que dan evidencia las cinco ejecuciones que llegan a aparecer al día en Tijuana. Aunque esto responde al principal problema en México, el narcotráfico como benefactor para la Polis, dando buenos sueldos a sus “trabajadores”, y comprando a las autoridades locales. Y como diría el susodicho filósofo, es preciso mantenerlos en control; donde el estado podría tener la oportunidad de dejarse de hipocresías y asumir su alianza, legalizando los narcóticos extraídos de la tierra y autorizando los centros donde efectivamente se consume. No habría un gran cambio, sólo que el control ya residiría en el estado, uno verdaderamente laico.
Aristóteles ya recalca la importancia de que el estado eduque a la juventud, y la gran responsabilidad que tienen los maestros como mediadores entre la condición actual y la futura. Lo que trae la necesidad de educadores regidos por los Aristos, bajo una nueva reforma educativa.

El hombre se convirtió en lobo del hombre más marcadamente desde el capitalismo, aunque esta situación viene desde la llegada del cristianismo a Grecia, Nietzsche menciona que se llegó a la “anarquía de los instintos”, se pierde la esencia de la autarquía del estado cediendo a un ente externo o a una esperanza de felicidad. Por lo que a este escrito compete sólo nivelar la actual condición a la de un verdadero estado, sin llegar a “mejorar” la condición, recordar que al gobernante le compete la conservación de la vida y el respeto a la voz del pueblo.

Tijuana debe comenzar a trabajar desde sí y para sí, aceptando la pluralidad que se da, y olvidándonos de homogeneizarnos, porque no somos ni seremos ejemplo para nadie, sólo hay que saber habitar, concientizarnos que vivimos en la arista entre dos fuertes influencias, de donde es posible aprovechar esta riqueza en conjunto de las comunidades aledañas. Cumplir con la calificación de “República” mexicana, aunque esto pueda afectar a la democracia.




Fuentes:

• Aristóteles. (1999), La Política. México. Ed. Porrúa
.
• Aristóteles (1999), Ética nicomaquea. México: Ed. Época.

• Bamford Parkes, Henry. (1979) La historia de México. México: Ed. Diana. 15-30.

• Foucault, Michel. (1994), Estética, ética y hermenéutica: las mallas del poder. Barcelona: Ed. Paidós. 247-254.

• Hobbes, Thomas. (2005), Leviatán. México: Ed. Gernika.

• Mason, Edgard. (1982), México: crisis y supercrisis. México: Ed. Posada.

• Marx, Karl. (1988), Manifiesto del partido comunista. México: Editores mexicanos unidos.

• Nietzsche, Friedrich. (2005), El ocaso de los ídolos. España: Ed. Edimat. 47- 54 y 71-81.

• Schopenhauer, Arthur. (2009), El arte de tener siempre la razón y otros ensayos: aforismos sobre el arte de saber vivir. México: Santillana ediciones generales. 9-49.

Sobre el elogio de Abraham en Temor y temblor.


(En el día mundial de la Filosofía)

Tras la historia que la Biblia nos expone sobre un hombre llamado Abraham, que tuvo la facultad de ser elegido por Dios y llevar a cabo su voluntad a través de grandes suplicios, nos queda claro su ejemplo de fe inquebrantable (al grado de sacrificar a su único, y amado, hijo). Kierkegaard pone de manifiesto el valor del “Caballero de fe” comparado con el “Héroe trágico”. El primero de estos debe sufrir en nombre de la esperanza, de una meta que a la vez de ser externa es meramente personal, que la sociedad no tiene porqué comprender su razón de obrar; mientras que el héroe se sacrifica en nombre de la sociedad en general, por lo que se gana la admiración de todos, principalmente del poeta, que se encarga de narrar sus hazañas.
La diferencia trascendental en Abraham es la fe, la cuestión es qué tipo de fe y qué tipo de Dios hacen que su elegido sufra semejante tormento. Kierkegaard menciona que la fe es una paradoja, convierten al sujeto que Dios bendice en el ser más desgraciado, pues éste obra en nombre de la moral, y a su vez gana estar al nivel de la deidad en cuanto su vida termine, como el autor dice, va más allá de lo general, de lo absoluto. Es por eso que la interpretación de lo que hizo Abraham con su hijo en la cima del Morija, se puede tomar como vil asesinato o la superación de la mayor prueba de fe impuesta sobre un hombre.
La paradoja de la fe, y su absurdo, ponen de relieve el tipo de virtud en el héroe y el caballero de fe, quienes obran con una teleología de la moral distinta, una cercanía con lo divino. La crítica a Hegel recae en que éste no entiende a la fe como una paradoja, donde “Lo íntimo es superior a lo externo”, sino que, al igual que el poeta, pretende hacer de Abraham un ejemplo al nombrarlo “Padre de la fe”. Hegel entiende a Dios como razón, Kierkegaard como absurdo (no en un sentido peyorativo sino como un misterio, como la transmutación del vino y el pan de la eucaristía).
La paradoja de la fe baila entre el amor y el odio, lo correcto y lo incorrecto, lo externo y lo interno, la soledad y la compañía; que con la moral se definen en su “deber” para así manifestar su obra con su pensamiento; es decir, la moral viene a desquebrajar la fe.
Kierkegaard es el único religioso que ha ganado mi respeto y admiración, pues ostenta un descontento con el cristianismo al quererse apegar a la razón, y por lo tanto su religión se convertiría en un ateísmo disfrazado. ¡Pues el punto del dogma es el absurdo mismo! Tertuliano ya lo mencionaba desde varios siglos atrás.
La fe representa angustia, esa angustia que tiene el religioso, el “elegido de Dios”. Un deber absoluto ante el ser supremo.
Ahora, pregunto yo, si la fe trasciende a la moral (y la moral no puede meterse en el estado, como dice Schopenhauer) ¿puede la fe en uno mismo trascender al estado? ¿Puede conducirme a la autarquía?...



Bibliografía:

Kierkegaard, Sören (1947). Temor y temblor. Buenos Aires: Ed. Losada. Págs. 19-29 y 65-97

Cavilaciones marxistas en torno a un pensamiento crítico para México.

Marx propone en su teoría dos corrientes inscritas dentro de ella, las cuales no se separan, son complementarias; mas cada una de estas tiene su propia característica. Estas son el marxismo crítico y el marxismo científico. En el presente trabajo, me enfocaré más en el criticismo marxista pero, por ende, no se dejará de lado lo científico. Ante esto, es preciso hablar un poco sobre lo que trata el pensamiento crítico de Marx.

En esta perspectiva, vemos la sociedad en una constante lucha de clases, la cual se ha presentado durante toda la historia de la humanidad, entre opresores y oprimidos, burgueses y proletarios. Esta dominación ha estado ahí siempre, latente, liberándose por medio de revolución; sin embargo, el burgués siempre va estar buscando tácticas, técnicas, para poder someter de una forma u otra al obrero y toda su “clase”.

Sabiendo que la realidad está de algún modo sometida por el burgués, es necesario estar identificando y analizando los nuevos fenómenos sociales. Así pues entendemos a la naturaleza como antagónica del capitalismo, porque este modelo convierte todo en mercancía, y cuando se habla de todo es excesivamente todo, desde lo material hasta lo intangible, útil e inútil, estético o execrable. Esto sucede porque en este panorama totalizador en donde la clase del burgués lleva las riendas, va eliminándose poco a poco la “naturaleza humana” entendida como aquellas necesidades que el hombre debe cubrir para su supervivencia, para el bienestar social y particular a la vez; es decir, el desarrollo del entorno para sobrevivir por medio del trabajo.

Lo que pretende el pensamiento crítico es hacer que pensemos socialmente, salir de la enajenación del capitalismo; en otras palabras, volver a ser más humanos.

Si bien, el patrón explota al obrero haciéndolo trabajar excesivamente por un salario insuficiente para cubrir hasta las necesidades básicas, este es sólo un problema dentro de toda la cantidad de consecuencias, nada favorables para la sociedad, que trae el capitalismo. Como mencioné ya, es necesario ver cada problema como una totalidad. Mihailo Marcovic menciona “El pensamiento crítico de Marx es la expresión más plena e históricamente, la más desarrollada de la racionalidad humana. Contiene una forma dialécticamente superior… una conocimiento racional acerca de la estructura del mundo.” Por lo que se convierte en la forma de desenajenación que a su vez puede convertirse en enajenante.

Marx pretende que el proletariado derrote a la burguesía, que triunfe por medio de la revolución; para esto el obrero debe cobrar conciencia del trabajo enajenado en el que se encuentra. De la plusvalía. Pero algo curioso sucede, la burguesía, al imponer el modelo capitalista en todos lados se vuelve contra ellos, dice Marx: Las armas de que sirvió la burguesía para derribar al feudalismo se vuelven ahora contra la propia burguesía. Pero la propia burguesía no ha forjado solamente las armas que deben darle muerte; ha producido también a los hombres que empuñarán esas armas: los obreros modernos, los proletarios. Es por esto que Marx apoya a los capitalistas.

De antemano, es preciso saber porqué Marx quiere que la humanidad se emancipe de capitalismo. El capitalista se apropia de las riquezas por medio de saqueos o imperialismos, además de que no logra para todos la libertad, igualdad y fraternidad.

Ante esto se propone la idea de la dialéctica marxista, en donde el problema social se toma desde la perspectiva de totalidad y desde un sentido de autoconciencia, donde la historia debe tener un sentido también, saber hacia donde vamos.

A la par de esto, incluida en el paquete de dominación burgués, se encuentra el problema de la verdad. Lo verdadero ahora es lo que el capitalista decide que sea verdadero, o para llamarlo más sutilmente se le dirá ideología, donde el capital ya no es arrebatado sino que la clase obrera va a entregar su dinero a manos de otros capitalistas a cambio de la satisfacción de deseos que estos mismos provocan con el afán de vender, trabajo de la mercadotecnia, y lo que resulta peor es que sean cosas inútiles y excesivamente caras. Por así decirlo, el obrero trabaja gratis.

A partir de esto la ciencia debe trabajar de una forma humanista, ética, que se apegue a la “verdadera verdad” porque también cae dentro del control burgués, ideológico y/o religioso, en donde podemos ver cómo es posible que se distorsione la realidad.

La lucha que tiene el marxismo es que se ha convertido en un dogma, el pensamiento crítico se perdió, y por ende el desarrollo y los catalizadores revolucionarios caen, y el capitalismo surge con una fuerza aún mayor. Es como lo dice la frase de Bardeau “Sin marxismo no hay socialismo”.

En México la enajenación está muy presente, no por nada mantenemos al hombre más rico del mundo, pues estamos perdiendo elementos culturales, y seguimos al país, por desgracia y/o fortuna, vecino quien hoy en día “Domina el mundo”. Lo que pasa es que es excesivamente conveniente para la clase burguesa mantener en pasividad al proletariado, deshaciendo culturas e imponiendo prototipos culturales. Ahí está uno de los tantos problemas en nuestro país, el control siempre está sobre nosotros, la revolución en realidad ya no funciona para esta época, (me refiero al uso de la violencia física, o al incremento de muertes) porque cualquier intento de nacionalismo que se intente poner en México, o cualquier otro país, Estados Unidos ya lo está tachando de fascismo y trata de impedir cualquier fomento dentro del mismo país. Es donde nacen racismos por parte de la población ignorante.

México no podría ser un país socialista, el capitalismo nos ha corrompido, hasta literalmente hablando, para esto es necesario que caiga la nación dominante y que se reconozca una verdadera independencia dentro del país, que nuestra cultura se refuerce, que tengamos nuevos sentidos, que nos convirtamos en un país crítico y se derroque la propia burguesía. Sin embargo, al haber vivido ya en esta lucha de clases, y que muchos seamos “tentados” por la ambición, un ejemplo es el nacimiento de la “Narcocultura” (aunque en esta reside principalmente la consecuencia de la falta de empleo). Sin embargo, es realmente necesaria la desalineación del capitalismo, por lo que el pensamiento crítico que Marx propone es sumamente benéfico para nuestra nación. Porque ya no se habla de imponer un modelo socialista o comunista, sino deshacernos del cancer que corrompe esta sociedad y nos afecta hasta como individuos.

Fuentes.

· Marcovic, Mihailo. El Marx Contemporáneo. FCE. México. 1974.

· Marx, Karl. Manifiesto del partido comunista. México.1988.

· Bardeau, Javier. Sin contemplar el pensamiento crítico marxista no hay

socialismo posible. Consultado: 06 de mayo de 2010. Desde:

http://www.aporrea.org/ideologia/a39724.html

· Feinmann, José Pablo. Filosofía aquí y ahora. Extractos sobre Marx.

· Tanuro, Daniel. Marx y la naturaleza. Consultado: 07 de mayo de 2010

Desde: http://www.anticapitalistas.org/node/2745

Una reflexión sobre la apatía en la educación mexicana.

Se habla de que los estudiantes en México no rendimos lo suficiente, y a consecuencia de la apatía. Como es costumbre, definiremos lo que atribuye el uso de esta palabra. Según Abbagnano alude a la insensibilidad, a la indiferencia hacia todas las emociones y el desprecio de éstas; logrados mediante el ejercicio de la virtud. El sentido que se tiene de la apatía no siempre ha tenido ese carácter peyorativo con el que lo conocemos; para los cínicos y los estoicos era “La felicidad misma” pues era la suprema aspiración de estos sabios, pues despreciaban todo lo "Académico".

Ante este tema de la apatía, Kant menciona “La apatía es un ideal noble, pero la naturaleza fue sabia al dar al hombre la simpatía, para guiarlo provisionalmente y antes de que la razón alcanzara su madurez en él como una ayuda o apoyo sensible a la ley moral y como un sucedáneo temporal de la razón” He ahí la clave, encontrar la simpatía.

Las diversas teorías educativas se basan en “motivar” al alumno; lo que muchos no se han percatado es que la formación del formador (valga la redundancia) viene siendo la misma, sistemas importados que por lo general no se adecuan a nuestro tipo de sociedad. Menciona E. Meneses que a través del desarrollo histórico educativo en México, por mencionar algunas, está el modelo positivista de Porfirio Díaz, luego con los revolucionarios José Vasconcelos cambió la visión de la educación en un ámbito pluralista y “Latinoamericanista”, la cual continuo un poco con Calles en cuya presidencia la educación fue más utilitarista y pragmática inspirada en Rousseau, características que continuaron hasta Echeverría; sin embargo las ciencias sociales, o humanísticas eran importantes para el desarrollo educativo del alumno, aunque se le da más importancia a lo práctico.

La abulia, o apatía, en el salón de clases por lo general tiene influencias externas; sólo es cuestión de analizar el contexto socioeconómico y cultural. Por ejemplo, un típico estudiante de secundaria; quien debe levantarse temprano para ir a la escuela, no alcanza a desayunar, sus padres no tienen el suficiente recurso monetario para que pueda comprarse una comida en la escuela (en donde los precios son elevadísimos) lo que hará que pase hambre en el aula y no le interese otra cosa más que comer. Otro aspecto está en la dinámica que tiene el profesor, si a éste no le interesa lo que está enseñando menos hará que el alumno aprenda algo o al menos le dé curiosidad por el tema. Por otra parte está el aspecto psicológico, según Valentini la apatía proviene también por la baja autoestima, la tristeza, la depresión, elementos en los que el educador no se detiene a apreciar en su pupilo; pues ya existe un modelo de alumno que espera el maestro, los padres, la sociedad… y resulta frustrante no alcanzarlo. El no poder comprender un tema expuesto en clase es la principal fuente de apatía para quienes no tienen otras. Sabemos de antemano que estos son problemas evidentes para el sistema, pero todo sigue igual.

En nuestro país lo que nos absorbe es la televisión, puesto que nos hemos adaptado más hacia lo audiovisual, aspecto que la educación ha querido aprovechar y ha decidido establecer sus programas de “modernización educativa”. Por ejemplo el aún vigente “Enciclomedia”. La cuestión es ¿Por qué a pesar de estos esfuerzos la apatía persiste? En primer lugar, el acceso a la tecnología aún es limitado, exclusivo, y se convierte en una fuente adicional para que la escuela le saque más dinero a los padres de familia a fin de mantener este tipo de aparatos, y peor que no esté funcionando con los alumnos. otro aspecto es la pasividad a la que el jóven está acostumbrado, y lo fácil que resulta enajenarse en estupideces.

La apatía viene también de la metodología rigurosa a la que se quiere apegar el maestro, métodos hechos para sociedades ajenas, lo que debería hacerse es capacitar a los maestros para que puedan hacer que el alumno se interese por lo que está exponiendo, teniendo en cuenta el contexto en el que nos estamos viendo, que el aprendizaje realmente sea significativo, como proponía Ausubel. y que, además, se le propicie un pensamiento crítico. Si de por sí, muchos jóvenes no pueden estudiar, y muchos de los que lo hacen son apáticos ¿Cómo estará nuestro sistema educativo?





Fuentes

• Abbagnano, Nicola. Diccionario de Filosofía. México: FCE. 1998.
• Cuelí, José. Coordinador. Valores y metas de la educación en México. México: Ed.
La Jornada. 1990.
• Valentini, Rodolfo. Reflexiones sobre el fenómeno de la apatía en ámbitos
escolares. Consultado en: 19 de mayo de 2010.
Desde: http://www.educar.org/articulos/apatia.asp

Refutación al concepto de una cultura universal.

La presente es una ponencia que presenté en el XXVII congreso nacional de estudiantes y pasantes de filosofía celebrada en mi universidad. Adjunto al final una sección de preguntas y respuestas de las cuales me acuerdo, haber contestado.

¿Qué es la cultura?

El concepto de cultura ha cambiado con el transcurso del tiempo, tiene múltiples interpretaciones. Esta evaluación diacrónica comienza desde los griegos, donde la cultura se entendía como la paideia que trataba sobre la educación o formación de los ciudadanos, contenía un carácter aristocrático, por lo tanto, elitista. Tiempo después, para los romanos, el concepto cambió a los “Humanitas” transformación que adquirió el sentido de autoformación del individuo, el cual seguía con esta característica aristocrática y contemplativa de ver el mundo. Fue en la edad media que la cosmovisión, dentro del concepto cultural, pasó a ser teocéntrico; el renacimiento trajo consigo la “Cultura” que, gracias a la revolución francesa, pierde su connotación elitista y se comprende como el producto y conjunto de saberes, conocimientos, de una población. Significación que hasta hoy permanece.

La cultura mantiene un conjunto de formas de vida, costumbres, tradiciones, desarrollo ya sea artístico, o formal, con el que se distingue un grupo social. También puede entenderse como el resultado proveniente de la actividad humana, que sigue una técnica, como el Arte.

Por lo tanto, como lo menciona Teo Ramírez, la cultura es el reino en el que se despliega aquel ser, el hombre, que tiene por misión el autoformarse, hacerse a sí mismo, darse una naturaleza, constituirse en una interacción continua con lo que ya hay.

La cultura es una dicotomía, donde hay un equilibrio entre lo natural y lo artificial, lo espiritual con lo material, la libertad y la obligación. Esto quiere decir que dentro de un grupo cultural exista una uniformidad, sino que es menester la diversidad, es esencial la diferencia.

La diferencia responde a la necesidad creativa que otorga el ser social, lo que se entiende como el “Sentido de la cultura”, la creación de sentidos, opuesto a los patrones culturales. Puerta hacia el etnocentrismo, antropocentrismo e imposiciones culturales; sobre lo que profundizaremos más adelante.

La cultura en los animales

Durante mucho tiempo se ha pensado que la cultura es un aspecto meramente del ser humano, el cual no hay que olvidar también es un animal, y gracias a conductas antropocentristas, donde se considera al hombre como el centro del universo, los animales se han percibido como seres inferiores, indignos, e incapaces de crear algo tan complejo como lo es la cultura. Una explicación a esta respuesta es que el concepto de “Cultura” es más ideológico que realista, empírico; es como no aceptar la evolución biológica, dice Sabater Pi.

La Etología ha descubierto que la cultura animal se origina a través de conductas no instintivas que aparecen gracias a la imitación, y permanecen con el tiempo, caracterizando a un cierto grupo animal.

Como ya dije, la cultura necesita de diversidad entre sus individuos, el plano animal experimenta estos fenómenos culturales como el presentado por Kawamura en donde descubrió que un grupo de macacos japoneses, conocidos como lavadores de patatas, comenzó con esta práctica gracias a la innovación de una joven hembra, llamada Imo, que descubrió un mejor sabor en las papas que los científicos dejaban en la arena, al arrojarlas al agua (al igual que un puñado de granos). Este proceder le trajo como recompensa un mayor número de alimento, por lo que sus compañeros más jóvenes, y sus contemporáneos, comenzaron a copiar la técnica. Esta innovación se comprende como una transmisión cultural; ya que los demás miembros continúan haciéndola a partir de actos, mientras que nosotros por medio del lenguaje, como los libros o los mitos, que sirven como catalizadores culturales.

El uso de herramientas es otra característica que se le ha adjudicado sólo al hombre; hay cierto número de otros animales que también las usan, como algunos primates, invertebrados, aves y algunos otros mamíferos; quienes han distinguido a cada uno de sus grupos sociales a partir del uso que le dan a la herramienta, para abrir frutos o cazar termitas, como lo hacen los chimpancés. O también depende de la fabricación, o manipulación de cierta herramienta, lo que atribuye un grado mayor de cultura al grupo.

La cultura se presenta sólo en algunos animales, puesto que puede presentarse entre los que conviven en sociedad únicamente, en manadas, porque la cultura es un impulso evolutivo que se aprende socialmente. Algo con lo que los antropólogos estarán de acuerdo.

Los cambios culturales.

¿Qué es lo que sucede, pues, ante el enorme panorama de elección que ofrece la creatividad? Surgen los cambios culturales. Estos se adoptan tras la innovación, incorporación o abandono de conductas en el grupo social.

“Apertura al sentido” es como define Víctor Manuel Pineda a la cultura. Lo que nos refiere que esta necesidad de significación puede expresarse de manera estética a través del Arte, el cual, según Herder, retrata el espíritu del pueblo Volksgeist y a su vez la época. Por ejemplo no es lo mismo la danza del vientre, que la danza del venado; cada una representa a su propia cultura, tiempo, costumbres y creencias.

El problema surge cuando los catalizadores culturales, como son los medios masivos de comunicación en la actualidad, intentan imponer un patrón cultural, un modo preestablecido de comportamientos, que no encaja con la cultura en donde nacemos; y peor aún, que estemos empeñados en seguir estos estereotipos por modismos, negando nuestro ser.

Estos patrones culturales, que causan cambios en el grupo social, provocan que viejas tradiciones se pierdan, que la sociedad se desarrolle en torno a un prototipo (Como el que todas las mujeres debemos ser esbeltas, rubias, y usar marcas reconocidas) y al no poder alcanzarlo viene el desprecio dentro de la misma sociedad, mientras que todo esto responde a técnicas de mercado en donde, como dijo Francisco de Quevedo Poderoso caballero es Don Dinero.

Comparaciones culturales.

Ante esta diversidad de culturas, y un solo productor de estereotipos, encontramos el etnocentrismo, quien asevera que sus practicas culturales son las únicas válidas, las mejores, y todo aquel que no las asimile carece de “Civilización”. Un ejemplo claro es Estados Unidos, frente a los países tercermundistas, los cuales deben adaptarse a lo que este país hace, entrar dentro del marco de la globalización, donde se domina al mundo por medio de la producción de deseos.

Con este grado de etnocentrismo comienzan las comparaciones culturales; donde se cotejan las culturas de acuerdo al criterio de la nación dominante, y la jerarquía da pie a la intolerancia, al racismo, a la total y completa ignorancia.

¿Por qué una cultura no puede ser mejor que otra? Porque, para empezar, nosotros sólo tenemos nociones de la cultura a la que pertenecemos y el juzgar la cultura ajena requiere del “Relativismo cultural”, el cual afirma que los rasgos culturales son relativos a una determinada cultura, y podemos estudiarla mediante el relativismo sistemático y el relativismo metodológico.

El relativismo metodológico expone que para comprender una cultura hay que entenderla desde ella misma; es decir, no existen criterios comparativos para juzgar si cierta cultura es preferible, para comprenderla hay que vivirla. Cosa que el relativismo sistemático apoya, diciendo que nunca podremos llegar a conocer otra cultura más que la propia; pero, existen ciertos prototipos culturales que ya son universales, válidos en cualquier cultura, es a lo que se le entiende como universalismo. Resulta producente cuando auxilia en un plano de transculturalidad, que ayuda a resolver problemas de acuerdo a características propias de la naturaleza humana, entendida como un ser animal que somos.

Conclusiones.

Si bien, la cultura se presta a infinidad de respuestas por parte del individuo, eso es lo que actualmente se está perdiendo. La cultura debe formar individuos encaminados hacia la naturaleza, que no olvidemos la animalidad que hay en nosotros. Se necesita la producción de individualidades libres, como lo menciona Nietzsche al referirse a la cultura griega.

La naturaleza y la cultura, los esenciales en el ser humano, porque siempre vamos a necesitar vivir en sociedad y desarrollarnos, creando la necesidad de sentidos nuevos es a lo que se refiere la cultura. Innovación, respeto y desenajenación.

Una salida para la civilización que nos impone la cultura hegemónica, un segundo plano para la historia en tanto se vuelve a la naturaleza


Bibliografía

· Bramblett, C.A. El comportamiento de los primates. México: FCE.1984. Págs. 277-

281.

· M. Ramírez y V.M Pineda, Vieyra J. Filosofía de la cultura. Universidad

michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Facultad de Filosofía.

1995. Págs. 39- 76.

· Sabater Pi, J. Introducción a la Etología. México: CONACULTA-CRÍTICA. 1991.

Págs. 216- 219.

· Sabater Pi, J. Gorilas y chimpancés del África occidental. México: F.C.E. 1984.

Págs. 56- 59, y 98- 123.




Pregunta 1: ¿Cuál es el concepto que tienes de naturaleza al que haces alusión en tu texto?

Respuesta: Me refiero al sentido marxista, pues tiene en cuenta que el hombre tiene que trabajar para asegurar su supervivencia y por tanto no se deslinda de los instintos o "biomecanismos" como animal racional.

Pregunta 2: En el sentido de las comparaciones culturales ¿Cómo es que México se enfrenta a Estados Unidos en esa necesidad de "sentidos"?

Respuesta: Es porque seguimos con esa imitación a otras culturas, no creamos sentidos, nos alejamos de esa importancia que le dabamos a la naturaleza. Pero esto no significa que hágamos homogéneo a todo el país, pues podemos ver la diferencia entre la gente de los estados del sur y los del norte. Particularmente Estados Unidos no es un país que me agrade, por eso no he cruzado desde hace tiempo, y es porque ellos no tienen una cultura, ellos crean deseos no sentidos, y por desgracia es la nación más dominante. Ante ese problema que tenemos he enfocado mi vista hacia España, que es de donde ha nacido la mitad de nuestra cultura; pero ese es otro trabajo sobre el cual estoy trabajando. Ya no todo se trata sobre la identidad nacional.

Pregunta 3: ¿Dices que existe una diferencia en la perspectiva nacional desde el nivel geográfico?

Respuesta: Si, pero esta va a homogeneizarse con la globalización, que destruye lentamente las culturas. En México tenemos un país formado por diversas comunidades o subculturas, como en España, la diferencia es que ellos si defienenden sus "comunidades autónomas", nadie se salva de la globalización. Es por eso que la gente de aquí necesita nuestro trabajo como filósofos.

Pregunta 4: ¿Cómo es que las culturas siguen ahí a pesar de todos los años que ha estado presente la globalización?

Respuesta (que pretendía dar puesto que el señor que preguntó salió algo molesto): Los efectos de la globalización, que en realidad es un eufemismo del imperialismo mundial de E.U, son lentos pero muy evidentes. Por ejemplo ¿por qué debemos hablar inglés todos (olvidándonos de lo simplón del idioma) para comunicarnos con otra nación que no sea de habla hispana ni de habla inglesa? ¿Por qué todos los patrones culturales tienen que venir de E.U? La globalización es todo un eufemismo.

Sobre este blog

Crítica, expresión filosófica para todos.

Opiniones sobre lo que acontece en Tijuana, México y el mundo desde una perspectiva analítica, preparandonos para la fatalidad del mundo y esa paradójica belleza que brinda la vida.